Esta publicación es vergonzosa. No hay absolutamente nada de malo en elegir abstenerse de tener relaciones sexuales antes del matrimonio. Nos estamos burlando de las personas por negarse a pecar. Nuestra cultura está profundamente corrompida cuando nos unimos a este tipo de crueldad. Como adolescente, desearía haber visto más modelos a seguir que defendieran con orgullo la abstinencia. Necesitamos desesperadamente normalizar esto de nuevo.