La última vez que el oro y la plata tuvieron repuntes comparables fue en 2020. Poco después, Bitcoin corrió como 10 veces, seguido de una de las temporadas alternativas más locas de la historia. Puede que ahora mismo cueste imaginarlo, pero no me sorprendería que algo similar ocurriera el año que viene. Curioso cómo están todas las señales ahí, pero la mayoría de la gente sigue sin creerlo.